Aun faltando meses para que la Junta de Gobierno de la UNAM iniciara formalmente el proceso de auscultación de la comunidad universitaria para la designación del Rector que sustituirá al Dr. José Narro, quién termina su segundo período al frente de nuestra Casa de Estudios, el Presidente Peña Nieto empezó a mover sus peones, en forma por demás obvia, para “hacerse del control” de nuestra Casa de Estudios, prácticamente la única gran institución nacional que aun goza de credibilidad.
El Dr. Sergio Alcocer, ex Subsecretario de Relaciones Exteriores para América del Norte, renunció a ese cargo “para reintegrarse a la actividad académica”, léase, para buscar la Rectoría, con un alarde de publicidad en páginas completas patrocinadas en diarios nacionales, desayunos multitudinarios con organizaciones extrauniversitarias y comidas políticas, muy alejado de los usos y costumbres universitarios.Leer más